Poco a poco la uva tempranillo fue comiendo terreno a la garnacha y hubo una época en la que su cultivo en algunas zonas era casi residual. Una variedad de uva desprestigiada durante años, que está recuperando su posición y su estatus, como la uva autóctona española que es.
La también denominada como tinta aragonesa, debido a su origen en la zona de Aragón y Cataluña, es la variedad mediterránea más cultivada en el mundo. En España se cultiva principalmente en las provincias de Zaragoza, Toledo, Navarra, La Rioja, Madrid y Tarragona. Existen diferentes variedades de garnachas: garnacha peluda, que es una mutación de la garnacha tinta, garnacha blanca, garnacha tintorera.
La garnacha tiene racimos de tamaño medio y compactos; de color rojo oscuro y morado que da lugar a vinos equilibrados, con cuerpo, poco ácidos, de poco color y elevada graduación alcohólica. Sus producciones son bajas, pero muy apreciadas por su complejidad estructural y aromática de sus vinos. Es una de las variedades de uva mejor recoge el carácter del suelo y del entorno, de tal modo que podemos encontrar toda una serie de características diferentes de la misma uva que pueden llegar a confundir a enólogos y entendidos pensando que son distintas variedades.